por Elena Comelli
Es demasiado pronto para parar. En línea con las expectativas, el Banco Central Europeo elevó los tipos de interés en 25 puntos básicos, elevando el tipo de referencia al 4% y el tipo de depósito bancario del BCE al 3,25%. El propio BCE señala en su boletín que las medidas de mercado de las expectativas de inflación a un año apuntan al 2,2%: los tipos reales se sitúan, por tanto, cerca del 1,8%. El nuevo aumento se consideró necesario porque “la inflación ha bajado pero se estima que se mantendrá muy alta por mucho tiempo”, enfatizó la presidenta Christine Lagarde al final de la mesa.
La junta está “decidida a garantizar un regreso oportuno de la inflación a la meta del 2% en el mediano plazo”, según Lagarde. Los nuevos pronósticos macroeconómicos apuntan a una inflación levemente promedio de 5,4% para el cierre del año (desde el 5,3% señalado en marzo), 3% para el cierre de 2024 (desde el 2,9%) y 2,2% (sin cambios) para el cierre del año. 2025. Las proyecciones de crecimiento se han recortado en paralelo: crecimiento del PIB de 0,9% este año (desde 1% en marzo), 1,5% el próximo (desde 1,6%) y 1,6% (sin cambios) en 2025. En la eurozona, “Las perspectivas para el crecimiento económico y la inflación es todavía muy incierto”, explicó Lagarde. “Es probable que el crecimiento económico siga siendo débil en el corto plazo, pero se fortalecerá a lo largo del año gracias a la moderación de la inflación”, agregó el presidente. Parecen indicar este peligro las palabras del viceprimer ministro Matteo Salvini, quien se preguntó, hablando en la Asamblea Cooperativa: “El Banco Central Europeo se da cuenta de que con su política puede reducir la inflación en un punto cero, pero ¿perjudica a las familias y las empresas? ?”. “Me gustaría que la política de economía e infraestructura no siguiera solo algoritmos”, agregó. Está claro que la subida de tipos afecta principalmente a países muy endeudados como Italia, cuya deuda pública sigue aumentando: en abril volvió a subir en 21.800 millones respecto al mes anterior, alcanzando un máximo histórico de 2.811,6.000 millones, el Banco de Italia anunció ayer.
Sin embargo, la presión sobre el costo del dinero no termina ahí. La presidenta Lagarde dijo: “¿Hemos terminado nuestro viaje? No, no hemos llegado a nuestro destino. ¿Tenemos otro camino? Sí”.
More Stories
Aplicación de carga global de Bosch
Los mercados de valores hoy, 29 de agosto. Nvidia cae tras los cálculos, pero las listas de precios de la UE se mantienen
Fiat Multipla 2025: ¿Un vídeo repasando cómo será el coche Anti-Dacia?